El líquido que vale oro

Pudiese uno pensar que es el petroleo, sin embargo, al menos desde que el hombre es hombre o antes, sin duda es el agua un líquido que vale oro. Hasta este momento no he visto una plataforma política de algún partido que de la importancia debida a este tema. Uno sabe que son corruptos, que con nuestros impuestos se pagan unos sueldazos, etcétera, pero el que no tengan un compromiso claro y científico respecto al abastecimiento de agua a nuestra ciudad: NO TIENE MADRE.

En el trayecto a mi oficina siempre paso por áreas verdes como el paseo de Reforma y la tercera sección de chapultepec, los árboles son una muestra clara de recolección al menos por área y por volumen de agua, si sus hojas estuviesen diseñadas para recolectar agua, aunque en realidad dicha distribución está enfocada a la recolección de luz solar. No podría uno construir una especie de arboles que recolectasen agua. Me viene a la mente los árboles o plantas selváticas cuya hoja es usada muchas veces como paragüas o por que no hojas tipo alcatraces.

Definitivamente estoy molesto, mis impuestos son a la de agüevo, ni siquiera puedo condicionarlos a un desempeño. Observo como valiosas mentes son domadas y convertidas a meras mentes administrativas y enfocadas al consumo, por demás miserable.

¡QUIERO UNA SOLUCIÓN PARA EL AGUA O AL MENOS SER PARTE DE LA LUCHA POR SOLUCIONAR ESE PROBLEMA! Me gustaría ahondar más, pero a mis espaldas pesa la obligación, tengo ojos que observan, el grillete de la necesidad oblígame a pensar en otras cosas. Quizá lo que me agrada, si es que puede usarse el verbo agradar, de dicho grillete es que construyo y no administro otras inventivas humanas. ¿Qué es mejor, quedarse pasivo y rezar o entender y preguntarse?