Ayer hablando por teléfono con mi demiurgo me enteré tristemente que mi madre de nuevo no volvió a abrir su restaurante debido a la escasez de agua dada la inteligencia e inventiva de quienes toman decisiones por nosotros. El restaurante de mi madre este año ha sido golpeado económicamente por diversas situaciones como la influenza y la escasez de agua. Sin embargo a diferencia de la última ocasión, ahora ni siquiera se llenó la cisterna. El hilo de agua que sale es miserable. ¿Dónde está el diputado que ganó en nuestro distrito? ¿A donde puede uno quejarse o solicitar que una de las políticas de este gobierno sea la distribución de agua? Hace ya bastantes horas escuchando diferentes noticieros uno se entera que es probable que pretendan aumentar la base fiscal, supongo que para que presidencia no salga en portada por haber sobrepasado si presupuesto insuficiente o tal vez decidan aumentar el presupuesto científico para que la solución al problema del agua sea sustentable e inteligente.
Algo curioso es que si uno hace una visita a diversos blogs y foros de noticias, no hay ni una sola opinión positiva de la clase política gobernante. A todas luces hay comentarios que resaltan sus corruptelas. Quizas se deba a su exquisita formación intelectual el que permitan talas con sus alegres consecuencias como la falta de lluvias. ¿Se repetirá la historia en una especie de comedia? Más impuestos, menos empleos, más desigualdad económica, menos educación, etcétera, sin embargo yo creo que no habra acto de dramaturgia esta vez, pues ahora tenemos más futbol y novelas. Irónico, pues el pan y circo es lo que lleva a una sociedad a la decadencia.
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