Observo en la lámina como cuando era un niño cómo fantásticos personajes votos mutuos entregan. Entre el devengar de la realidad y la ficción, las cuerdas de la lira razga, el ancho focal amenazante, los labios concavos. ¿Son augurios? A las campañas habrán de partir por irreal que pareciese y mejor aún si tiene a Hefestión.
Llegará el momento, las entrañas se desbordarán y en ese instante, como cuando la vida prendió el pabilo, solo, como la vela enmedio de la oscuridad, solo, la luz se extinguirá. Mientras, bebamos y a la salud, pues la luz es juguetona, fluye dibujando sonrisas y pintando tristezas.
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